La mangonada es una bebida mexicana que combina lo mejor del mango maduro con el toque ácido del limón, el picante del chile y el dulzor del chamoy. En esta versión con mezcal Del Maguey, transformamos la tradicional receta de mangonadas en un cóctel artesanal que captura el alma de México: vibrante, colorido y lleno de sabor; en coctelería también se conoce como cocktail Mango Mezcal por su equilibrio entre fruta y notas ahumadas.
Este mangonada cocktail es ideal para quienes buscan una bebida refrescante, con el equilibrio perfecto entre lo dulce, lo ahumado y lo picante. Cada sorbo te transporta al calor de las calles mexicanas, donde el mango y el mezcal se encuentran en una mezcla irresistible.
Esta receta combina la dulzura tropical del mango con el toque ahumado del mezcal y el contraste picante del chamoy y el Tajín. Cada ingrediente tiene su papel: el mango aporta cuerpo y frescura, el limón equilibra con acidez, y el mezcal añade esa profundidad característica que transforma un clásico callejero en un cóctel artesanal. Para 1 litro de Mangonada (4 copas) vas a necesitar:
Este cóctel combina tradición y creatividad: una bebida callejera convertida en experiencia gourmet gracias al equilibrio entre dulce, ácido y picante. Con ingredientes sencillos y un poco de paciencia, lograrás un resultado digno de cualquier barra profesional.
Preparar una mangonada con mezcal es más que seguir una receta: es un ritual sensorial. Desde el aroma del mango recién licuado hasta el toque ahumado del mezcal, cada paso invita a disfrutar del proceso.
La clave de una buena mangonada con mezcal está en el control de las temperaturas y capas. Al mantener el mango bien frío y licuarlo justo antes de servir, se logra esa textura cremosa característica sin que el hielo diluya el sabor.
El chamoy y el Tajín, más que simples toppings, funcionan como acentos que despiertan el paladar y resaltan los matices del mezcal. Así, cada sorbo pasa de lo dulce a lo picante y de lo afrutado a lo ahumado, construyendo una experiencia compleja y equilibrada digna de la coctelería mexicana contemporánea.
El secreto de una buena mangonada con mezcal empieza en la elección de sus ingredientes. Usa mangos bien maduros, ya que su dulzor natural y textura cremosa son la base perfecta para lograr una bebida equilibrada. Los mangos ataulfo o manila son ideales por su sabor suave y aromático.
Combínalos con un mezcal de buena calidad, preferiblemente artesanal y con notas ahumadas ligeras que realcen, sin eclipsar, la frescura del mango. El chamoy, por su parte, añade el contraste justo entre picante, ácido y salado: ajusta su cantidad según tu gusto para lograr el punto exacto de intensidad que prefieras.
Con cada variación, descubrirás una nueva forma de disfrutar esta emblemática bebida mexicana que celebra la mezcla de contrastes, colores y sabores que tanto caracterizan al espíritu del mezcal.
La mangonada con mezcal, también conocida como Mezcal Mango Cocktail, es mucho más que un cóctel: es una fusión entre la creatividad urbana y la herencia artesanal del agave. Cada sorbo cuenta una historia de contrastes —el dulce del mango maduro, el picor juguetón del chile y el toque ahumado que solo un buen mezcal puede aportar—, una experiencia que resume la esencia misma de México.
Prepararla en casa no solo es una invitación a disfrutar del sabor, sino también a explorar el universo mexicano y la coctelería con mezcal, donde tradición e innovación conviven en perfecta armonía. Disfrútala despacio, deja que los sabores evolucionen en el paladar y permite que te inspire a descubrir nuevas formas de celebrar la cultura del agave y su espíritu inconfundible.